YOGA Y FAMILIA

YOGA Y FAMILIA

Cuando hablamos del Yoga en la actualidad, relacionamos esta ciencia milenaria con el bienestar físico y espiritual de las personas que lo practican habitualmente. Aquellas ideas acerca del carácter dogmático y el misticismo del yoga, parecen desvanecerse poco a poco con la creciente aparición de diferentes estudios de yoga en las ciudades, programas de televisión, artículos de prensa, centros de recreación y deportes entre otros. Esta afición por el Yoga está también popularizándose en grupos específicos como personas con enfermedades crónicas, terapias de rehabilitación física y familias y niños. Este artículo se enfoca especialmente en el yoga para niños y familias y en los beneficios y características de la práctica para esta población.

EL YOGA Y LOS NIÑOS

A principios de los años 70 comenzó a incorporarse el yoga en los centros educativos de países como Chile, Argentina y Suecia con el propósito de transmitir el yoga y sus beneficios a niños y jovénes en sus lugares de estudio. De alguna manera, los primeros experimentos de yoga en las aulas de clase partieron de la gran preocupación de surgió a raíz de la aparición del estrés infantil por la presión que el sistema académico ejercía sobre ellos. Fuera de la escuela, el yoga para niños empezó a ser popular entre la amplia gama de actividades a las que éstos asisten luego de la jornada escolar, diferenciándose por trabajar sutilmente la espiritualidad en los niños y la paz interior entre otros valores.

Una clase de yoga para niños tiene una duración aproximada de 45 minutos donde en un ambiente amable los niños aprenden de una forma sencilla principios de respiración conciente, Asanas o posturas de yoga con nombres de animales y objetos y técnicas de relajación. La práctica física del yoga, en sí misma, incorpora elementos de psicomotricidad, danza e integración neurosensorial que ayuda al desarrollo físico y mental de los niños en su fase escolar. En el aspecto psicosocial, los niños tienen la oportunidad de relacionarse desde la sencillez de la práctica con otros niños compartiendo valores como la paciencia, la solidaridad, el respeto al otro y a sí mismo y la no competencia. Los niños comienzan a crecer con un amor particular hacia el yoga, en el que luego podrán profundizar a medida que crecen.

Los principios fundamentales de una clase de yoga para niños son la diversión y el respeto. La destreza del profesor radica en la capacidad de hilar la clase con historias, juegos y elementos que capturen toda la atención de los niños y hagan que la clase fluya de forma sencilla y armoniosa. El mejor indicador y quizás el único de una clase de yoga exitosa, es el gusto de los niños por ésta. Eso los padres lo sabrán inmediatamente su hijo salga del salón.

El yoga en los niños:

- Ayuda a corregir vicios posturales de las largas jornadas escolares.

- Oxigena los órganos y elastiza los músculos a través de la respiración conciente y las asanas.

- Genera mayor seguridad en sí mismos.

- Desarrolla el autocontrol y la coordinación motora.

- Promueve la no competitividad, el respeto y la conciencia del entorno.

EL YOGA EN FAMILIA

Tradicionalmente en las escuelas de yoga, las clases se han dividido por grupos de edades y ocupándose cada quien de su práctica.. Sin embargo se han encontrado grandes beneficios en las series de yoga en parejas, mamá-bebé y yoga en familia. Por ejemplo, es posible hacer estiramientos más profundos con la ayuda de un compañero en clase y mejores alineaciones de las posturas o Asanas. También es posible terminar la clase con un masaje o juego grupal.

Sin embargo el aspecto más importante de estas prácticas es el fortalecimiento del vínculo afectivo entre sus miembros en una actividad saludable y llena de valores implícitos. Como en el yoga infantil, el yoga familia también convoca a sus miembros a tener más conciencia de sí mismos y del mundo que los rodea, a desarrollar hábitos saludables y oxigenar cuerpo-mente a través de la respiración profunda. En el yoga familia es posible hacer divertidas posturas grupales, estiramientos en tríos y en parejas y como en el yoga para niños, en un lenguaje sencillo libre de dogmas o doctrinas religiosas.

El yoga en familia:

- Genera un nuevo momento de reunión que convoca a todos los miembros de la familia en una actividad sencilla y divertida.

- Fortalece el vínculo afectivo entre sus miembros a través del reconocimiento del otro en un lenguaje no verbal.

- Armoniza las relaciones entre hermanos a pesar de las diferencias de edad.

Carta de un profesor de yoga a una familia:

Como terapeuta familiar e instructora de yoga, he visto como el caos de estos tiempos ha afectado a cada uno de los miembros de la familia. Padres ausentes, sentimientos de culpa, conflictos escolares, vacío espiritual, desesperanza y marcados episodios de depresión, vanalidad y excesos en los adolescentes, son el pan de cada día en las consultas y clases. En el yoga no existen intermediarios. Es una experiencia consigo mismo a través del contacto con los sentidos. Quizas sea el yoga solo una buena alternativa para hacer una pausa, silenciar tu agitada mente y entrar en la sutil calma del sonido de tu respiración. Si eres adulto volver a ser niño y abrazar la sencillez de esta etapa de la vida recordando que no se necesita mucho para sentirse pleno. Si eres niño, mirar a tu padre o a tu madre por un momento como se mira a un buen amigo. Darle un lugar en el círculo a esa tia o abuelita que quiere pasar más tiempo contigo y olvidarte por un momento de aquellos acuerdos que has hecho con la sociedad que a veces te castigan y volver a lo escencial: tu cuerpo y el momento presente, el aquí y el ahora. Tal vez, con el tiempo, encuentres ese lugar seguro con solo cerrar los ojos y tu nueva calma sea llevada a tus actividades cotidianas. Quizas seas más condecendiente contigo mismo y con los otros haciendo grandes cambios en el mundo empezando por tu propio mundo familiar. Pero tu primer gran logro y el más importante fué tomar la iniciativa de estar aquí y por eso te felicito. Por lo pronto, ponte cómodo en tu tapete de yoga, cierra los ojos y respira. Yo te voy a acompañar a donde quiera que decidas ir.