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jueves, marzo 10

Practica integral de yoga


Asanas o posturas del yoga

Toda técnica proseguida con persistencia y concentración puede conducir al nivel superior de conciencia que corresponde al estado yoga. 


El Hatha-yoga, es una variante de los yogas clásicos practicados en la india y cuya meta persigue la vitalización del cuerpo y la purificación del sistema para-nervioso.
La práctica del Hatha-yoga incluye una parte física y una parte mental. La física se compone esencialmente de dos elementos: 
1) las posturas (asanas) y, 2) las respiraciones dirigidas (pranayama). 
La parte mental juega un papel determinante de la que depende en gran medida el efecto obtenido por las prácticas físicas: hay que concederle la importancia que merece.
Los elementos básicos del Hatha-yoga, practicado corrientemente bajo una disciplina que sólo se traduce en tiempo de dedicación, permiten un aprovechamiento de sus ventajas físicas y mentales sin asociarle a elementos religiosos o filosóficos o al de la evolución espiritual de alcanzar planos superiores.

El provecho que produce una práctica regular de estas técnicas elementales de Hatha-yoga es enorme en comparación con el esfuerzo que exige. Este inmenso beneficio no puede hacer que nos olvidemos de la prudencia y la moderación: practicar técnicas peligrosas puede provocar graves desórdenes en los sistemas respiratorio, circulatorio y nervioso; aún los ejercicios más fáciles y aparentemente más inofensivos no están exentos de peligro a menos que se practiquen cumpliendo cada detalle.

La práctica integral
Para comentar sobre los beneficios del yoga se puede comenzar diciendo que proporciona salud y longevidad; los asanas devuelven la flexibilidad a la columna vertebral, verdadero eje vital, calman los nervios sobreexcitados, relajan los músculos, vivifican los órganos y sus centros nerviosos. Los ejercicios respiratorios (pranayama) proporcionan oxígeno y energía a cada célula, purifican el organismo quemando desechos, expulsan toxinas; la relajación preserva la integridad del sistema nervioso, previene las neurosis y libera del insomnio.
El cuidado del cuerpo en el yoga merece mucha atención. Basta con modificar algunas costumbres convencionales erróneas, responsables de un número amplio de males físicos y mentales. La salud es un derecho natural de nacimiento; es tan natural tener buena salud como nacer. Descuidar o ignorar las necesidades del cuerpo, tenerlo por una cosa no sagrada, es descuidar y negar nuestra buena salud.
El Hatha-yoga nos lleva a conseguir un cuerpo fuerte, sano, exento de sufrimientos y capaz de vivir largo tiempo.
Practicar el Hatha yoga no significa necesariamente practicar esta doctrina, sin embargo, hay que disipar ciertos prejuicios extendidos en nuestra cultura que consideran a los asanas como una acrobacia insensata, inútil, incluso hasta peligrosa, o se cree que ciertas posiciones se asumen dolorosamente con la intención de mortificarse. Pronto usted se dará cuenta que jamás son causa de sufrimiento; ¡al contrario!
La práctica del yoga es evolutiva, es decir, usted avanza en la medida que se ejercite con frecuencia, de lo contrario podrá hablar del yoga como un teórico sin experimentarlo realmente.


Consejos prácticos



1. Hacer la práctica con el estomago vacío.

2. No darse un baño muy caliente o muy frío inmediatamente después de los asanas.
3. Antes de la sesión de asanas, procurar entrar en estado de concentración sobre su cuerpo como un objeto de respeto absoluto.
4. Los asanas no son ejercicios de fuerza ni violencia.
5. Termine siempre su sesión con relajamiento.
6. La práctica regular y cotidiana es la prenda del éxito.


Recuerde: no se desanime al principio, pronto sentirá el progreso de su cuerpo y su mente

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